Guillermo A. Kalen(*)
La religión cristiana es la religión con mayor cantidad de seguidores alrededor del mundo y su característica fundamental es que reconoce a Jesucristo como el hijo de Dios. La Iglesia, la institución emblema de esta religión, ha tenido altos y bajos a lo largo de la historia de la humanidad: la influencia divina en las épocas monárquicas, el orden establecido que ha mantenido tanto la moral como la ética de la sociedad, las Cruzadas en nombre de Dios y la Inquisición son claros ejemplos de esto.
La misión de esta Institución ha sido defender, mantener y extender los valores y enseñanzas de la Biblia en todo momento y podemos conocer sus posiciones en una gran variedad de actitudes que la Iglesia interpreta, considera y juzga como desviadas o apartadas de sus creencias tales como la eutanasia, la homosexualidad, el ocultismo, y … ¿qué piensa la Iglesia de la magia?
En la Biblia se establece que: “cuando entres en la tierra que el Señor, tu Dios, te dará, no aprendas a practicar las abominaciones que cometen esas naciones. Que no haya entre ustedes nadie que inmole en el fuego a su hijo o a su hija, ni practique la adivinación, la astrología, la magia o la hechicería. Tampoco habrá ningún encantador, ni consultor de espectros o de espíritus, ni evocador de muertos. Porque todo el que practica estas cosas es abominable al Señor, tu Dios, y por causa de estas abominaciones, él desposeerá a esos pueblos delante de ti. Tú serás irreprochable en tu trato con el Señor, tu Dios porque las naciones que vas a desposeer escuchan a los astrólogos y adivinos, pero a ti el Señor no te permite semejante cosa.” Esta cita del Antiguo Testamento nos ilustra el pensamiento que guía la postura que debe tomar la Iglesia con respecto a la magia.
Si bien la actitud de dicha institución con respecto de algunas prácticas mágicas, tales como la astrología o la alquimia, fue ambigua en algunos momentos de la historia, la condena cristiana de la brujería fue explícita e inequívoca desde los comienzos de la religión cristiana.
En la Edad Media existen varias leyes que condenan a la brujería que se basaban tanto en el ejemplo del derecho romano como en la voluntad de erradicar todas aquellas prácticas relacionadas con el paganismo. Según Richard Kieckhefer, “aquellos que la practicaban [la magia] estaban en peligro tanto física como espiritualmente por los mismos demonios que intentaban controlar. (…). Esto [la magia] llevaba a asumir erróneamente algunas cosas acerca de los demonios: su poder y su dignidad.” . La Iglesia creyó necesario distribuir un documento llamado Malleus Maleficarum, una guía comprensible para identificar, perseguir y castigar a las brujas escrito por dos alemanes en 1486 , debido a la corrupción y la perversión que consideraba presente en la sociedad de la época. La paranoia se sembró en la sociedad con el apoyo y el beneplácito de la Iglesia. Afirman algunos que “la creencia en las brujas se extendió como una epidemia (…). Representantes del pensamiento moderno como Paracelso, Nostradamus, Bacon, Galilei, adquirieron fama de tener alianza con el diablo” .
Hoy en día la Iglesia es una institución de dimensiones inconmensurables y ha mantenido una fuerte influencia sobre la sociedad; gracias a su espíritu conquistador -llamado espíritu misionero- establece ‘casas del Señor’ alrededor del mundo entero. Actualmente, en el siglo XXI (para muchos difícil de creer) la “caza de brujas” ha resurgido con los libros famosos que hablan de un joven mago: Harry Potter.
La institución tiene una clara postura frente a la magia, pero, debido a la diversidad de voceros que tiene, existen también diferentes opiniones dentro de la misma. En el año 2003, el Papa Juan Pablo II le dio el visto bueno y aprobó los libros de Harry Potter y, paralelamente, el Cardenal Ratzinger apoyó a un crítico con una opinión sesgada en relación con estos libros y le envió una carta que decía: "Es bueno que usted ilumine a la gente sobre Harry Potter porque esas son seducciones sutiles que actúan desapercibidamente y por eso profundamente distorsionan la cristiandad en el alma antes de que pueda crecer apropiadamente" . En esta misma carta, el Cardenal anima al crítico a enviarle su trabajo al sacerdote Peter Fleetwood, quien precisó que “una cosa es brujería y otra la fantasía. Todos hemos crecido en un mundo de magos y de hadas que no es anticristiano, sino que ayuda a los niños a entender el conflicto entre el bien y el mal”; justo lo contrario de lo que afirma Ratzinger en otra carta a la citada escritora: “Que los niños pierden el espíritu de discernimiento entre el bien y el mal y que no tendrán la fortaleza y conocimiento necesarios para comprender las tentaciones del mal”.
Pero también hay situaciones de índole francamente cristiana que confunden a los creyentes, tales como que en la cabalgata de los Reyes Magos de Sevilla, desfila la carroza de Harry Potter precediendo al Rey Baltasar ya que “según nuestra visión, el también tiene que ofrecer su magia al niño Jesús y dar caramelos a los niños” ; y además, la Librería de San Pablo de la calle Sierpes de Sevilla, propiedad del Arzobispado, exhibe en su vitrina el último libro de Harry Potter junto a ejemplares de la Biblia y otros libros religiosos.
Dicho lo anterior, paso a preguntarme qué piensa la escritora, J. K. Rowling, de la Iglesia. La mejor evidencia que existen aspectos cristianos detrás de sus libros proviene de un artículo en la revista American Prospect:
“Rowling inicialmente tenía miedo que la gente supiera de su fe cristiana porque podría revelar desenlaces futuros en la serie: "Si yo hablara libremente de eso," le dijo al reportero canadiense, "Creo que el lector inteligente — tenga diez [años] o sesenta — va a poder adivinar qué va a venir en los libros".”.
Si es cierto que un mayor conocimiento acerca de las creencias cristianas de la autora podría ayudar a un lector inteligente a adivinar hacia dónde van los libros (o si tales creencias están de cierto modo reflejadas en los mismos), entonces la trama de la serie entera tiene que estar de alguna forma relacionada con la cristiandad a través de diferentes aspectos que detallaré a continuación.
Religión Cristiana en Harry Potter
La enciclopedia virtual Wikipedia recoge algunos aspectos históricos bien conocidos acerca de la relación entre la Iglesia y la magia: “el término Inquisición hace referencia a varias instituciones dedicadas a la supresión de la herejía en el seno de la Iglesia Católica. La Inquisición medieval, de la que derivan todas las demás, fue fundada en 1184. En España, durante los tres siglos que dura, prácticamente la mayoría de los casos se someten al proceso de la Inquisición local de forma regulada y documentada. Aunque sería el último país en abandonar la cruel figura de la Inquisición, ya hacía mucho tiempo que no ejecutaba a muerte a supuestas brujas.” Esta persecución de herejes ha sido recriminada por muchos y la serie Harry Potter es ejemplo de ello. En los libros hay prácticas inquisitorias de claro origen cristiano que aparecen en la obra, como, por ejemplo, el momento en el que en el tercer libro de la serie se asigna al protagonista una tarea escolar sobre la Inquisición en la época medieval, en donde “los muggles eran particularmente temerosos de la magia pero no muy diestros para reconocerla; Wendolin la Rara fue quemada en la hoguera 47 veces con varios disfraces ”.
En el mundo mágico de Harry Potter existen tres maldiciones imperdonables: Cruciatus, Imperius y la maldición asesina Avada Kedavra. La primera de ellas es llamada la maldición de la tortura, la cual ocasiona un dolor semejante al que se podría sentir si quemaran cada nervio del cuerpo; proviene de la raíz latina Crucis que se puede relacionar con la palabra cruz. ¿No recuerdan estas palabras, asociadas con la tortura, al Vía Crucis de Cristo o a su dolor en la Cruz? Por otro lado, la palabra Imperius proviene de la raíz imperio y significa comando, podría también estar relacionada también con el Imperio Romano, conocido por establecer e imponer la religión cristiana como religión oficial en su vasto imperio. La maldición asesina Avada Kedavra proviene de un antiguo idioma del medio oriente, lenguaje llamado arameo, y significa “desaparece como esta palabra” . Este idioma, casualmente, era la lengua hablada en la época de Cristo y en la que al parecer fue escrita parte de la Biblia.
Uno de los objetos que tiene una gran importancia en Harry Potter, respetado por los magos de más prestigio incluso, es el Cáliz de Fuego. Este objeto lo podemos observar por primera vez en el cuarto libro de la saga, llamado precisamente “Harry Potter y el Cáliz de Fuego”. Este cáliz se describe en los libros como “una gran copa de madera” y su función es la de determinar al mago digno de cada escuela que participa en el Torneo de los Tres Magos . Existe otra copa emblema de torneos e incluso batallas (cruzadas, por ejemplo): el Santo Grial, copa de la cual se dice que tomó Cristo en la Última Cena. Aunque se dice que el Santo Grial es de plata, también se especula que pudo haber sido de madera, por ser la copa de un pobre carpintero, al igual que el cáliz de fuego de la obra de Rowling. Según la leyenda del Rey Arturo, el Santo Grial servía para determinar si un caballero era digno o no, muy parecido a la función del cáliz de fuego en los libros de Harry Potter.
Criaturas y Personajes
Asimismo, existe una serie de criaturas y de personajes que se asocian a la religión cristiana tales como el fénix, las serpientes, el unicornio, el hipogrifo y algunos personajes. Fawkes es un ave fénix de los libros de Harry Potter que pertenece al Profesor Albus Dumbledore y es uno de los animales más importantes a lo largo de la historia; pero también el fénix es un símbolo de resurrección de la religión cristiana .
Las serpientes son conocidas en la Biblia como símbolo del demonio Satanás, que tienta a Adán y a Eva en el Génesis y pervierte por primera vez (pecado original) a la humanidad: “Entonces Jehová Dios dijo a la mujer: ¿Qué es lo que has hecho? Y dijo la mujer: La serpiente me engañó, y comí. Y Jehová Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias”. El símbolo de la serpiente en la saga concuerda con la interpretación bíblica de la religión cristiana ya que es asociada con la casa “donde la mayoría de los magos oscuros salen” , llamada Slytherin (cuyo animal heráldico es la serpiente y cuyo nombre recuerda el sentido de to slither, reptar, arrastrarse), y con el símbolo del Señor Oscuro, que es una calavera con una serpiente saliendo de su boca. La asociación de la serpiente con la maldad está utilizada y reforzada en la serie Harry Potter a través de ejemplos como el basilisco, criatura abominable que atentó contra la vida de los estudiantes en la Cámara de los Secretos; el idioma pársel, considerado como una marca macabra en el mundo mágico y Nagini, serpiente mascota del propio señor oscuro.
El unicornio puede ser tomado como un símbolo de Cristo, ya que en el antiguo testamento lo mencionan varias veces , pero para muchos otros la perspectiva es diferente. En los libros de Rowling se establece que “la sangre del unicornio te mantendrá vivo, aunque estés a una pulgada de la muerte, pero a un precio terrible... Has matado algo puro... para salvar tu vida...". Un poco más adelante aparece: "tendrás tan solo media vida, una vida maldita, desde el momento que la sangre toque tus labios" (Primer volumen, pg 258, versión inglesa, traducción nuestra); así que no es muy difícil ver su relación con la eucaristía y es por eso que hay religiosos que afirman que “la sangre del unicornio asesinado es una enredada, distorsionada y pervertida analogía con Cristo (el Cordero asesinado) y con su Sangre redentora. El unicornio es presentado como un animal indefenso, puro y bello (igual que Cristo, el Cordero presentado en la Biblia). Matar el unicornio es un crimen monstruoso, pero el beber su sangre (analogía y perversión de la Eucaristía) conduce a una vida maldita.”
El hipogrifo es una símbolo de la unión de lo celestial (por las alas) y lo terrenal (el cuerpo) y es una de las criaturas de mayor relevancia en “Harry Potter y el prisionero de Azkaban”. Hay académicos que dicen que la unión de lo celestial y lo terrenal simboliza a Jesús: hijo de Dios que se hizo hombre.
Hay personajes en los libros que se asocian a la religión cristiana: monjas y frailes se presentan como almas perturbadas (“monjas fúnebres de figura harapienta arrastrando cadenas” junto con un “Fraile Gordo”), contrastando estos espíritus con un “alegre fantasma” en la ceremonia de la “Fiesta del Cumpleaños de la Muerte” que aparece en el segundo libro de la saga.
El antagonista de Harry en la escuela es Draco Malfoy, un chico de la casa de Slytherin que no hace sino molestar a Harry y a sus amigos. El apellido Malfoy significa en francés mala (mal) fe (foy), y se podría asociar a la falta de fe (fuera de la religión cristiana) del personaje en el libro. No es de extrañar que el padre de este chico antagonista se llama Lucius Malfoy, un eco de Lucifer, el ángel caído y alejado de la fe, uno de los tantos nombres del Diablo que encaja con el personaje, ya que es un poderoso seguidor del Señor Oscuro.
En el primer libro de la serie aparece un personaje presentado como muy generoso y noble llamado Nicolás Flamel que, según allí se indica, “celebró su cumpleaños 665 el año pasado”. No hay que ser matemático para darse cuenta que la edad en ese momento del señor Flamel es 666 años y es el año en donde decide “dar su vida” para eliminar la piedra filosofal y que no cayera ésta en manos del Señor Oscuro. Para la Iglesia, el 666 es el número del Diablo, como afirma el Libro del Levítico: “Para esto se precisa sutileza. El que tenga inteligencia calcule la cifra de la Bestia, porque es una cifra humana: 666.”
Algunas Teorías
La mayoría de los hechizos en Harry Potter son en latín y hasta el lema de Hogwarts, Colegio de Magia y Hechicería, está en esta lengua muerta. Se podría decir que es el idioma más importante para un mago en el sentido práctico, pero también fue el idioma principal del Cristianismo durante muchos siglos hasta fechas recientes. A pesar de que no hay una relación directa, el uso de esta lengua se puede asociar perfectamente en ambas partes: para invocar hechizos y para invocar la palabra del Señor.
Hay objetos que nos revela Rowling en el último libro escrito hasta los momentos titulado “Harry Potter y el Príncipe Mestizo” que se llaman horrocruxes. Es claro que tal designación evoca, en su sonoridad, a los términos horror y cruz. Los horrocruxes en la serie (horcruxes en la versión original) son objetos particulares en los que un seguidor del mal puede depositar parte de su alma a consecuencia de la comisión de asesinatos para posterior mente “reconstruirla”. Así que, conociendo que la función de este objeto es, de alguna forma, la resurrección, se puede asociar las palabras horrible y dolor/cruz (crucis) con la muerte de Cristo. Como este objeto también se refiere a la resurrección y se relaciona con la palabra horrible, ¿será que es horrible resucitar o que, desde las artimañas del mal, hay pasar por cosas terribles para resucitar?
Otro objeto que llama la atención del lector es el Velo ubicado en el Departamento de Misterios descrito en “Harry Potter y la Orden del Fénix”. Este velo, aunque no se sabe exactamente qué hace, parece un vínculo entre este mundo y la muerte o el mundo de los muertos según lo que la autora deja entrever: una vez que Sirius Black, padrino del protagonista, pasó de un lado del velo al otro, estaba muerto. Víctor Gómez nos comenta que “en la antigüedad, Cuando el rey Salomón construyo el Templo de Jerusalén, en la parte más central del templo, ‘el Sancta Sanctorum’ (el Santo de los Santos), se coloco el ‘Arca de La Alianza’ (El objeto más sagrado de la antigüedad). A la entrada del ‘Sancta Sanctorum’ estaba una ‘cortina o velo’ que nadie podía cruzar, sólo el Sumo Sacerdote y sólo una vez al año, en el día que se celebraba el “Yom Kippur” (Celebración de Expiación). El cruzar esta cortina o velo significaría la muerte para el infractor.” Entonces en la tradición judeocristiana también existe un velo que puede provocar la muerte; sin embargo, no podemos decir con certeza que existe una relación directa entre el velo mencionado en el quinto libro y el velo bíblico del sancta sanctorum.
En los escritos de J.K.Rowling se menciona con frecuencia el número “7” como número perfecto; inclusive ha decidido que su serie de libros de Harry Potter sean siete, y son siete los años que cualquier estudiante debe pasar en Hogwarts para graduarse. Por otro lado, en la Biblia también el número siete es utilizado repetidas veces. Ejemplo de esto son las siete Iglesias, los siete sellos, las siete trompetas, las siete copas, los siete días de la creación . No obstante, este número también es importante en otras creencias desde la cábala hasta el yoga, así que es imposible aseverar que Rowling se inspiró en la Biblia para utilizarlos en los libros; aunque, aun así, no deja de ser una posibilidad.
Voldemort es un nombre que pocos se atreven a decir dentro de la comunidad mágica de los libros. “El Señor Oscuro” o “aquél que no debe ser nombrado” son ejemplos de cómo un mago común se refiere a lord Voldemort, mientras que el protagonista, junto a escasos personajes de esta historia, menciona su nombre sin ningún temor y esto se puede interpretar con algo de gran relevancia para la religión judeo-cristiana: los antiguos hebreos no podía mencionar el nombre “Yahvé”: Cuando Dios se apareció a Moisés (Éxodo Cáp. 3), Moisés le preguntó a Dios cuál es su nombre y Dios dijo “Yahvé” que se traduce por “yo soy” y que significa “Él es el que Es”. Para los judíos, este nombre es tan Santo, tan omnipotente, de tanta reverencia que no se atrevían a pronunciar la palabra “Yahvé”; sino que cuando la leían, la sustituían verbalmente por «Elohim» o «Adonay» (el señor). La comparación entre Dios y Voldemort es totalmente anticristiana ya que Voldemort es el símbolo de la maldad, pero la idea de la “innombrabilidad” parece relacionarse con el temor o el respeto a un poder infinito.
La muerte de Dumbledore es una de las tragedias que conmovió a muchos lectores al punto de experimentar sentimientos de duelo. Existen ciertas semejanzas entre la muerte de Dumbledore y la muerte de Jesús: ambos fueron traicionados y entregados a la muerte por un miembro de su círculo más próximo ; ambos toman de un cáliz antes de entregarse a la muerte y ambos sufren una segunda traición – Jesús de su discípulo Pedro y Dumbledore del alumno Draco Malfoy –.
Lucha entre el bien y el mal
Entonces puedo afirmar que Harry Potter está lleno de aspectos simbólicos asociados a lo cristiano y que muchos creyentes y voceros de la Iglesia critican esta obra de J. K. Rowling; pero, personalmente, pienso no se dan cuenta que los valores que defiende la obra son muy parecidos a los que defiende la Iglesia. Creo que antes de tildar a la saga como un compendio de mensajes de antisemitismo, discriminación, herejía y perversión habría que resaltar los valores que se promueven: la amistad, el amor, el bien, la unión, la esperanza, la justicia, el esfuerzo y el trabajo. Las analogías con la actitud antisemita de la Alemania nazi o la discriminación racial del KKK son claramente señaladas como actitudes características de los personajes asociados con el mal, y con los conjuros y poderes realmente heréticos y contrarios a la vida sucede otro tanto.
Libros como “las Crónicas de Narnia” han sido categorizados como una alegoría cristiana ya que el león Aslan se sacrifica igual que Cristo y resucita para la lucha del bien contra el mal; pero yo digo: ¿Quién quita que Harry Potter no se pueda sacrificar por el bien del mundo mágico? Queda un último libro y su desenlace es un misterio para todos.
A mi parecer, la intención de J. K. Rowling con los libros no es la de promover el culto al Diablo, sino todo lo contrario: la de promover valores que podrían llamarse como los mismos por los que lucha la religión cristiana, valores más humanos, más reales y esenciales al Ser Humano. Continuamente se nos recuerda que Harry es un personaje que se salva por el amor materno y que tiene en el amor, la nobleza y la misericordia sus mayores poderes.
Estos valores acerca del sacrificio por los amigos, el triunfo del amor sobre la muerte y la moral no solo tienen que ver con la religión cristiana. Estos valores se enseñan en la mayoría de las culturas ancestrales alrededor del mundo: la lucha del bien contra el mal es fundamental para ayudar al lector a discernir entre ellos; es una necesidad para conocer, conocerme, conocerte, conocernos… No en balde, el lema que reza a la entrada del Oráculo de Delfos dice: “Conócete a ti mismo”.
Como conclusión, quisiera citar a un gran hombre que pudo ver a través de muchas cosas:
“En realidad, todas las cosas, todos los acontecimientos, para quien sabe leerlos con profundidad, encierran un mensaje que, en definitiva, remite a Dios.”
Juan Pablo II
(*)Estudiante de Ingeniería de Producción.
LLX-525 “Una relectura del binomio infancia/magia. El caso Harry Potter de J. K. Rowling” Profesora Lourdes C. Sifontes
BIBLIOGRAFÍA:
El cristianismo es una religión monoteísta de origen judío que se basa en su reconocimiento a Jesucristo como su fundador, mesías y figura central. Con más de 2.100 millones de adherentes, o cerca de un tercio de la población mundial, es considerada la religión del mundo con más seguidores. Información obtenida de Wikipedia (http://es.wikipedia.org/wiki/Cristianismo)
Cita del Libro del Deuteronomio, capítulo 18, versículos del 9 al 14.
Richard Kieckhefer 1995. Magic in Middle Ages. Cambridge University Press. (Traducción nuestra)
“Sorcerers Companion” (versión inglesa) pg. 260.
Elizabeth Frenzel. 1980. Diccionario de motivos de la literatura universal. Madrid: Gredos.
Actual Papa.
http://www.freelists.org/archives/ampex/12-2005/msg00007.html
Revista Acción. Cine – Video http://www.edijardin.com/accion/foro/viewtopic.php?t=1084&postdays=0&pos...
Wikipedia. http://es.wikipedia.org/wiki/Inquisici%C3%B3n_espa%C3%B1ola . El empleo de esta enciclopedia virtual para los efectos del presente trabajo se concentra en referencias a aspectos históricos ya bien conocidos y documentados. Estamos conscientes de la imposibilidad de utilizar este tipo de fuentes para la búsqueda de datos especializados.
“Harry Potter y el Prisionero de Azkaban”, Capitulo uno.
Según “Magic worlds of Harry Potter” por David Colbert, los antiguos magos usaban esta palabra para hacer que muchas enfermedades se desaparecieran, como esa misma palabra. Su recomendación se trataba de escribir la palabra una y otra vez “desapareciendo” una letra cada vez, quedando por último sólo la letra A.
Las escuelas participantes en el libro eran: Hogwarts (donde estudia Harry Potter), Beuxbatons (escuela francesa de sólo chicas) y Durmstrang (escuela de varones de población fundamentalmente germánica y de Europa oriental). Estas dos últimas fueron invitadas por Hogwarts para el Torneo de los Tres Magos. Un dato curioso acerca de Durmstrang es que parece proceder de un juego con la frase "Sturm und Drang" (Tormenta e impulso), que proviene de una tendencia literaria y artísticade el siglo XIX. De las obras mas destacadas de este movimiento, podemos citar el Fausto, de J. Wolfgang Goethe, obra en la que se detalla el pacto de un hombre con el diablo. Otra afinidad importante entre la obra y dicho movimiento estético podría ser la relativa al buque fantasma en el que llegan a Hogwarts los estudiantes de Durmstrang, que alude al barco fantasma de una reconocida obra de Wagner.
Se habla a veces del fuego de la transformación como una de las propiedades del fuego en un sentido más esotérico. Justamente el Santo Grial lo utiliza Cristo el día que sabe que es traicionado y va directo a su muerte que, para muchos psicólogos, es símbolo de la transformación.
Wikipedia. http://es.wikipedia.org/wiki/Simbolismo_cristiano
“Harry Potter y la Piedra Filosofal”.
“Dios los trajo fuera de Egipto; el HATH como si fuera la fuerza de un unicornio” Números 23:22. Otras citas están en Libro de Deuteronomio 33:17, Salmos 92:10 y Job 39:9.
http://www.medinasoft.com/ibipablovi/Informatica/Harry_Potter_1.htm
Hay quienes dicen que el Dragón (significado de la palabra Draco), es un símbolo del Diablo.
De entre tantos personajes importantes que están asociados a la alquimia, la autora elige a Nicolás Flamel. Dato cursioso ya que su apellido evoca fuego, flama o llama como las del infierno.
El personaje deja de producir el elixir de la vida que lo mantenía con vida por tanto tiempo.
Lev. 13-17:18.
Página web: http://blogs.hoycinema.com/p-victor-m-gomez-a- . Es importante mencionar que la descripción de este velo se encuentra en el Libro del Levítico y que también se menciona la muerte al traspasar dicha cortina: Lev. 16:2 Dijo Yahveh a Moisés: Di a tu hermano Aarón que no entre en cualquier tiempo en el santuario que está tras el velo, ante el propiciatorio que está encima del arca, no sea que muera: pues yo me hago ver en la nube encima del propiciatorio.
Todos estos ejemplos se pueden encontrar en el Libro de Apocalipsis y el Libro del Génesis. El número siete está presente en la Biblia desde la creación hasta el final. Un dato curioso es que la Biblia menciona que el Sancta Sanctorum se tardó en construirse una cantidad exacta de siete años.
Hay quienes dicen, por el recién encontrado Testamento de Judas, que Judas estaba actuando con el consentimiento de Cristo; pero también hay rumores que Severus Snape actuó también con el consentimiento de Dumbledore.
Universalia nº 26